Anaís Morales es una poeta y brujita feminista que encontraró la magia al liberar la espiritualidad a su manera, a partir del amor, la ternura radical y la sanación como forma de justicia para las mujeres en su linaje.
Actualmente tiene un proyecto llamado Cajitas Rituales, para hacer rituales específicos y de esta forma seguir con su ideal de promover la espiritualidad femenina y poder lograr que las mujeres recuerden su magia.
Hoy nos comparte tres poemas desde el amor y la sensualidad.
De amar con la mente, al cuerpo, al corazón.
Por Anaís Morales
Tu beso
Me la paso mordisqueándome los labios desde que te besé
Presionando mi pulgar con mis dientes
Cual recién nacida, al sentir mi dedo ocurre una reacción casi inmediata de succión
Todo lo que tocan mis labios me lleva de nuevo a tu beso, todo lo comparo con tus labios
Sostengo la respiración, veo al cielo, veo al suelo, esperando que nadie se dé cuenta
Siento que tengo en el cielo de la boca mil poemas en braille
Todos están esperando a que tu lengua los lea, me los traduzca
Desde entonces ni yo sé que digo, que pienso
Solo sé que sentí mientras mis dedos recorrían el camino de tu cuello a tu pelo
Lo recorro una y otra vez en mi mente
Esperando impacientemente a que tus labios traviesos se dignen a saludar a los míos de nuevo
2020
Todo lo que fuiste en una madrugada
Ayer fuiste mil canciones hasta el amanecer,
Fuiste mil besos perfectamente administrados,
Fuiste ojos que brillaban cada vez que me mirabas creyendo que no me daba cuenta
Fuiste un juego de escondite entre mis sábanas
Fuiste un trabalenguas entre mis piernas
Fuiste gemidos cual cánticos de sirenas
Fuiste un paseo de huellas dactilares por mi montaña
Fuiste risas de intermedio, lágrimas de placer
Pero, sobre todo, fuiste imperfecto
Me enseñaste tus cicatrices y tus marcas
Las partes de ti que no te gustan
Me presentaste a los que amas y odias al mismo tiempo
Me mostraste fotos familiares, ancestres y ángeles
Fuiste valiente y me dejaste conocerte, fuiste real aun cuando te dio miedo serlo
Fuiste quien tú eras
Fuiste la madrugada de enero que no sabía que necesitaba
Gracias.
2020
Ave fénix
A veces me siento a recordar las veces que nos hemos lastimado, lo recuerdo porque me ayudaste a ver que aún existe el dolor en mí.
Así que ven, siéntate conmigo,
¿Qué tal si pasamos toda la noche en vela?
Lamiéndonos las heridas, cual anestesia la que me das
quitémonos los puntos uno a uno,
decórame las cicatrices color esmeralda.
Dame esperanza de que ahora, lúcidos
el dolor nos duela, pero solo por la urgencia de querer curarnos
que nos duela el dolor del otro y nos llene de sentimientos encontrados
que la culpa no nos ahogue
que nos ilumine para hacernos ver que fuimos egoístas
Gritos cual aullidos para desahogarnos
Y después de toda esa llamarada de bagazo emocional que ardió por dentro
Cuando solo queden cenizas, que sigamos siendo amigos
Que nos salgan nuevas plumas
Vamos a retozar por la ciudad, bésame toda
acurrúcame en tu pecho, te lleno de flores el pelo
pégate a mí cuando haga frío.
Así cuando salga el sol de nuevo, cuando la luna se esconda
me veas y ya no te lloren los ojos, me ames y ya no duela
me beses y no se te hagan nudos en la garganta como antes.
Renazcamos mi amor.
2018
Puedes seguir a Anais Morales en redes sociales como @anaiscolorrosa