Categories
Poesía Resisters

Cartas sororas: Convocatoria

En 2022, desde Resisters impulsamos Cartas sororas como un ejercicio intergeneracional que buscó un intercambio de vivencias colectivas a través del recurso de las cartas. Dos años después Cartas sororas regresa para seguir acompañándonos desde la ternura y el cuidado en una segunda edición publicada. Consideramos que una carta sorora es una expresión escrita cargada de empatía, apoyo y solidaridad entre mujeres. Queremos que este sea un vehículo para compartir tus experiencias, pensamientos y emociones en torno a un momento que te gustaría contar, un consejo que quisieras dar o un testimonio que aún está dentro de ti. 

  • Bases

Esta convocatoria está abierta a todas las mujeres jóvenes que estén entre los 18 y los 35, sin origen o experiencia de vida. Podrán participar mujeres del territorio guatemalteco que residen en el país o exiliadas y migrantes guatemaltecas, tanto de habla hispana como de idioma originario toda vez adjunte la traducción al español de la carta. 

Formato de las cartas

  • Extensión. Las cartas deben tener un mínimo de una página tamaño carta y un máximo de una página y media.
  • Formato. La carta debe ser enviada en tipografía Arial, tamaño 12 puntos y un interlineado de 1.5.

Documentación y envío

  • Formato de envío. Adjunta el documento en formato Word de tu carta en el espacio correspondiente del formulario. 
  • Plica. El segundo archivo llevará por nombre el pseudónimo con el que la autora haya firmado la carta, haciendo constar que es la plica. 

Ejemplo: “Plica+pseudónimo” [cartas anónimas]

Ejemplo: “Plica+nombre” [cartas con autora]

Contendrá los datos para identificar a la autora: nombre (si es anónima, solo escribe “anónima”), lugar de residencia, número de teléfono, correo electrónico y edad. En este archivo se incluirá una breve biografía de la autora con un máximo de 10 líneas. 

  • Originalidad. La propuesta debe ser inédita, es decir, no debe ser un texto que se encuentre en certámenes, ni estar publicado en cualquier medio físico o digital; de lo contrario, será descartada.

Esta convocatoria está abierta desde la publicación de las bases hasta el 18 de octubre de 2024. 

  • Proceso de selección
  • Proceso de selección. Un comité editorial seleccionará las cartas que mejor reflejen la esencia de la convocatoria. El formulario y sus respuestas serán gestionados exclusivamente por la persona responsable de la secretaría de la convocatoria, parte del jurado quien se encargará de recopilar las propuestas recibidas y eliminar las referencias a sus autoras.
  • Publicación

Se seleccionará la cantidad de cartas que mejor respondan al objetivo de la convocatoria, ya sea por unanimidad o, en su defecto, por mayoría de votos del jurado, que se consideren que expresan mejor la temática y cumplan con los criterios de selección. Las cartas seleccionadas pasarán por un proceso de selección, edición y corrección, y de diagramación. Posteriormente, el libro se publicará y se promocionará para su distribución y venta. Todas las cartas seleccionadas y publicadas constituirán la segunda edición de Cartas sororas en colaboración de Resisters y Nosotras las Letras.

  • Aceptación de las bases del concurso 

La participación en esta convocatoria supone aceptar las bases  y ceder exclusivamente a Nosotras Las Letras y Resisters la edición, con conocimiento y aprobación de las autoras, publicación y reproducción de las cartas seleccionadas. Resisters y Nosotras Las Letras se comprometen a reconocer en cualquier momento y a través de cualquier forma la autoría de las cartas.

  • Compromisos y cuestiones de derechos

Derechos de autor

Tú conservarás los derechos de autor sobre tu carta. Al enviarla, nos das permiso para el proceso de edición y publicarla en el libro Cartas sororas y en cualquier material promocional relacionado con el proyecto. Si prefieres mantener el anonimato, respetaremos tu decisión.

*Consulta todas nuestra bases aquí. 

 

Categories
Poesía

De amar con la mente, al cuerpo, al corazón por Anaís Morales

Anaís Morales es una poeta y brujita feminista que encontraró la magia al liberar la espiritualidad a su manera, a partir del amor, la ternura radical y la sanación como forma de justicia para las mujeres en su linaje.

Actualmente tiene un proyecto llamado Cajitas Rituales, para hacer rituales específicos y de esta forma seguir con su ideal de promover la espiritualidad femenina y poder lograr que las mujeres recuerden su magia.

Hoy nos comparte tres poemas desde el amor y la sensualidad.

De amar con la mente, al cuerpo, al corazón.
Por Anaís Morales
Tu beso

Me la paso mordisqueándome los labios desde que te besé

Presionando mi pulgar con mis dientes

Cual recién nacida, al sentir mi dedo ocurre una reacción casi inmediata de succión

Todo lo que tocan mis labios me lleva de nuevo a tu beso, todo lo comparo con tus labios

Sostengo la respiración, veo al cielo, veo al suelo, esperando que nadie se dé cuenta

Siento que tengo en el cielo de la boca mil poemas en braille

Todos están esperando a que tu lengua los lea, me los traduzca

Desde entonces ni yo sé que digo, que pienso

Solo sé que sentí mientras mis dedos recorrían el camino de tu cuello a tu pelo

Lo recorro una y otra vez en mi mente

Esperando impacientemente a que tus labios traviesos se dignen a saludar a los míos de nuevo

 2020

 

Todo lo que fuiste en una madrugada

Ayer fuiste mil canciones hasta el amanecer,

Fuiste mil besos perfectamente administrados,

Fuiste ojos que brillaban cada vez que me mirabas creyendo que no me daba cuenta

Fuiste un juego de escondite entre mis sábanas

Fuiste un trabalenguas entre mis piernas

Fuiste gemidos cual cánticos de sirenas

Fuiste un paseo de huellas dactilares por mi montaña

Fuiste risas de intermedio, lágrimas de placer

Pero, sobre todo, fuiste imperfecto

Me enseñaste tus cicatrices y tus marcas

Las partes de ti que no te gustan

Me presentaste a los que amas y odias al mismo tiempo

Me mostraste fotos familiares, ancestres y ángeles

Fuiste valiente y me dejaste conocerte, fuiste real aun cuando te dio miedo serlo

Fuiste quien tú eras

Fuiste la madrugada de enero que no sabía que necesitaba

Gracias.

2020

 

Ave fénix

A veces me siento a recordar las veces que nos hemos lastimado, lo recuerdo porque me ayudaste a ver que aún existe el dolor en mí.

 

Así que ven, siéntate conmigo,

¿Qué tal si pasamos toda la noche en vela?

 

Lamiéndonos las heridas, cual anestesia la que me das

quitémonos los puntos uno a uno,

decórame las cicatrices color esmeralda.

 

Dame esperanza de que ahora, lúcidos

el dolor nos duela, pero solo por la urgencia de querer curarnos

que nos duela el dolor del otro y nos llene de sentimientos encontrados

 

que la culpa no nos ahogue

que nos ilumine para hacernos ver que fuimos egoístas

Gritos cual aullidos para desahogarnos

 

Y después de toda esa llamarada de bagazo emocional que ardió por dentro

Cuando solo queden cenizas, que sigamos siendo amigos

Que nos salgan nuevas plumas

 

Vamos a retozar por la ciudad, bésame toda

acurrúcame en tu pecho, te lleno de flores el pelo

pégate a mí cuando haga frío.

 

Así cuando salga el sol de nuevo, cuando la luna se esconda

me veas y ya no te lloren los ojos, me ames y ya no duela

me beses y no se te hagan nudos en la garganta como antes.

 

Renazcamos mi amor.

 

 2018


 

Puedes seguir a Anais Morales en redes sociales como @anaiscolorrosa

Categories
Fotografía Poesía

Al Sororo Rugir del Amor por Dulce Archila

AL SORORO RUGIR DEL AMOR

Mi resistencia la encuentro de color verde
Mi miedo lo convierto en furia
Mi marcha lo hago por las que nos faltan
Mis compañeras me dan fuerza de lucha
Mis exigencias se lo digo a un gobierno que no le importo
Mis calles se convirtieron en lucha
Mis amigas las cuido yo y no la policía
Mi fuego quema todo por las desaparecidas
y al sororo rugir del amor sé que podré resistir de la mano de las compañeras.

Dulce Archila
Instagram: @darchila_/@justicia.suspendida

Categories
Fotografía Poesía

La Delgada Línea por Maria Salazar

La delgada línea es una serie de poemas en los cuales Maria Salazar explora la locura, la confusión, la separación, los aprendizajes y la luz que se cuela entre las grietas que se generan durante la experiencia de crecer y explorar el mundo.

Creo que el problema

Casi siempre

es que me imagino demasiado haciendo algo increíble

paso mucho tiempo creando estos escenarios

ya ni siquiera es un daydream real

todo el tiempo quiero.

No sé a dónde quería llegar con esto

No sé que quiero.


Fotografía por Fernanda Montenegro.

Me dijeron que la ropa debía de enseñar lo suficiente para dejar cosas a la imaginación. Siempre tenía que tener olor agradable y mejor si no era muy dulce. No debía mencionar mis necesidades básicas como si no fuera humana, las mujeres no teníamos pelos donde no debíamos y yo no tenía que decir malas palabras en frente de los hombres así ellos podían sentir que era una mujer que valía la pena.

Aprendí a cocinar y a servir porque los hombres siempre comen en platos más grandes y yo conocí las dietas y las ensaladas, mejor si olvidaba que me gustaba el pan. Sin vicios y sintiendo superioridad en la palabra virginidad, pero sabiendo que había que mantenerlo entretenido cediendo por pocos y siempre mostrándome apenada.

La palabra pudor suena tan molesta, como se siente crecer creyendo que mientras menos real se es más fácil es lograr la única meta real en la vida, según mi cabeza adolescente, de gustarle a un hombre lo suficiente como para no temer que me abandonen, poco a poco sentir todo menos deseo de ser parte de esta construcción de vida de la señorita perfecta.

Salir al mundo creyendo que lo que se tiene que hacer es odiar y matar a todo lo que pueda ser un poquito más que yo, fue la mejor forma de aprender que no era nada más que una niña insegura y juiciosa, satisfecha de haber experimentado poco.

Salir al mundo creyendo que el riesgo estaba en las mujeres, con las que competía por aprobación, fue la mejor forma de que de una cachetada entendiera que el peligro real siempre fue pensar que todos los hombres iban a amarme por ser este ideal, y que lo que siempre iba a rodearme era esta idea romántica de la vida que tenía.

Nunca tuve que dejar de comer pan o rasurarme más para poder captar la atención. El mundo siempre tiene hambre, y no se trata de algo físico, sino de la libertad de consumirnos y dejarnos.


Fotografía por Fernanda Montenegro.

A veces creo que soy una mala persona.

Me gusta aprovecharme de mi cara o de la apariencia de niña confundida para jugar con la gente.

A veces le miento a mi mamá.

Me gusta jugar a que sí soy la persona que ella quisiera.

Me gusta ser una mala persona conmigo.

A veces me empujo a situaciones que me rompen, a veces no puedo decir que no.

Me gusta la sensación de que están jugando conmigo.

A veces pienso que me hiciste mierda al punto en que quiero volver a sentirme tan insignificante y que se sienta bien, que dejo que sigan utilizando mi cuerpo y entrando en mí como si realmente les estuviera dando un pedazo de mi.

Siempre creo que quiero decir una cosa y termino diciendo otra.


Fotografía por Fernanda Montenegro.

María Salazar @manosnefastas es una ilustradora, fotógrafa y escritora guatemalteca. Estos poemas son extractos de su nuevo libro “la delgada línea?” el cuál será lanzado por Editiorial Sión este año 2021. Sígue a Maria y Editorial Sión en redes sociales para no perdértelo.

Todas las fotografías fueron tomadas por Fernanda Montenegro @fermpx.


Fotografía por Fernanda Montenegro.